LUZ PILHEU

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(Título)
Luz Pilheu

(Copete)

La astróloga y psicóloga comparte su vida junto a Pursah y Doris quienes, asegura, son su familia. Además, cuenta cómo se aplica la astrología en las mascotas y cuán importante es su compañía en los momentos de depresión.

Por Paula Labonia.

(Nota)

-¿Cómo llegaron Pursah y Doris a tu vida?

-Pursah llegó en febrero de 2013. Ya venía con ganas de tener una perrita con mi ex y en una reunión de amigos hablaron de una que había nacido en el campo y le estaban buscando casa. La quise yo. En junio del mismo año apareció Doris. Estaba atada con un alambre al cuello en un quincho del campo del colegio donde yo trabajaba. El capataz me dijo que le habían dado la orden de buscarle otro lugar o sacrificarla. Así que le mandé un mensaje a mi ex contándole la situación y la llevé a casa con la idea de buscarle adopción. Eso fue imposible. Nos quedamos con ella. 

-¿Cómo fue la adaptación con Pursah?

-Pursah era la reina de la casa así que estaba re enojada. No se llevaron bien de entrada. Cada una miraba para un costado. Encima a la semana nos dimos cuenta de que Doris estaba preñada. Tuvo cinco cachorros. 

-¿La asististe en el parto? 

-Ella hizo todo, no tuvimos que ayudarla en nada. Eligió el colchoncito de Pursah para parir, al lado de nuestra cama. Estábamos los tres cruzados ahí mirándola. Muy zarpado. Después los cachorritos se tiraban arriba de Pursah para buscar calor. Y al tiempo los dimos en adopción.

-¿Ahora se llevan bien?

-Sí, se aman. Después de que parió empezamos a conocer bien a Doris. Porque estaba muy asustada cuando llegó. De hecho sigue siendo muy asustadiza. Ahora ya son hermanas. Juegan juntas, son muy compañeras. 

-¿Por qué se llaman así?

-Pursah por el personaje de un libro que nos gustaba con mi ex. Y Doris porque estaba perdida, como en “Buscando a Nemo”. 

-¿Cómo las describirías?

-Cada una tiene una personalidad diferente. Pursah cumplió diez años el 8 de diciembre pero sigue siendo re cachorra. Le encanta jugar, es re vital. Ella me conecta con toda la dimensión Sagitariana de la vida, como la alegría, el juego, la curiosidad, el explorar… el momento presente. En cambio Doris es más Canceriana, de estar más cerca mío, más atenta a lo que yo hago. Es muy maternal. Conmigo desde el inicio tuvo algo muy particular porque yo la rescaté.

-¿Qué suelen hacer las tres juntas?

-Salimos a pasear tres veces al día. Un paseo largo y dos cortos. Cuando me separé y nos mudamos no quise que tuvieran un nuevo paseador porque me pareció que eran muchos cambios. 

-¿Cómo te cambiaron la vida Pursah y Doris?

-En ellas hay partes que me representan. Son parte mía. De hecho con mi ex no hubo debate. Se quedaron conmigo. Y fue increíble el vínculo que desarrollamos las tres cuando nos mudamos solas. Son mi familia, mi lugar seguro, mi núcleo… mis bebés. Me despertaron todo un costado de cuidado que no me conocía. Mi rutina se armó en función de ellas. 

-¿Cómo se aplica la astrología en las mascotas adoptadas que no se sabe la fecha de nacimiento?

-En mi caso, a Doris la tomo como que es Canceriana porque la traje en esa temporada. Entonces hay algo que se constela en ese momento. En los perros y en los gatos se suele tomar la luna y la energía lunar. Yo intuyo que tiene una lunita en agua porque es muy territorial, maternal y empática. En cambio Pursah tiene luna en Libra y es Sagitariana. Ella es lo más simpático que hay en el mundo. Y a la vez necesita su espacio, no se queda pegada a vos. 

¿Se le puede hacer una carta natal a una mascota?

-Sí. Con el día y la hora exacta o aproximada (porque lo que uno se fija es en la luna), es posible. Puede servir para entender el carácter, las formas, su personalidad… También se puede trabajar con flores de Bach para bajar el nivel de estrés. 

-Como psicóloga, ¿recomendás la compañía de un perro en los momentos de depresión?

-Creo que es según el caso. Porque puede ser que a veces eso ayude y, en  otras, hay que pensar en el animal también. Quizás la persona no está en condiciones de cuidarlo. Sí creo que un perro puede mejorar el ánimo de una persona porque tiene algo de qué ocuparse, algo que hacer. Un compromiso afectivo si querés. Te reordenan un poco la vida. A mí me ayudaron en mi separación. Para mí fueron un motor. 

Cuenta de Instagram: @astro.luz

 

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