Rodrigo Lussich, Nano y Amanda

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El conductor de Intrusos cuenta cómo es el día a día de sus hijos perrunos y la fuerte relación de hermandad que tienen entre ellos. Además nos muestra, en una sesión de fotos súper tierna, la felicidad que le generan y cuánto le alegran la vida.

 

Por Paula Labonia

Fotografía: Sole Fernandez Arana

 

-¿Cómo llegaron a tu vida?

-Nano llegó en febrero de 2017. Tenía tres meses más o menos. Yo quería un labrador porque ya había tenido y me encantan. Él es el tercero, tuve también a Totó y a Winona, que llegó a conocerse con Nano pero a los meses falleció. El labrador es una raza que quiero tener toda la vida.

 

-¿Y Amanda?

-Es la regalona, la consentida. Acaba de cumplir un año. Se la regalé a Juampi, mi novio, (N de R: Juan Pablo Kildoff) para su cumpleaños. A las 12 me aparecí con una cajita y adentro estaba Amanda. Él ya había tenido un bulldog francés que falleció hace unos años y quería tener otro. Así que Amanda vive con él en Lomas pero viene con Juampi los fines de semana y entre semana también.

 

-¿Tienen planes de convivencia próxima o de retomar los preparativos del casamiento?

-No está muy determinado el tema de la convivencia. Todavía no está definido. Y el casamiento sigue en los planes pero para cuando la pandemia nos deje hacer una fiesta más grande y estemos un poco más relajados.

 

-¿Y cómo se llevan Nano y Amanda? ¿Costó la adaptación?

-Costó un poco al principio. Yo tenía miedo porque a Nano no le gustan los bulldog francés. ¡Los odia! Y es muy territorial. Le gruñó bastante al principio pero ahora la ama. Es su hermana. La cuida, duermen juntos. Son carne y uña. Ella le come su comida y él la deja. La consiente. Amanda ama llegar a casa y que esté Nano. Se le tira encima. Es su ídolo. Y el gordo la padece (risas).

 

-¿Por qué los llamaron así?

-A Nano porque así le dicen a Serrat. Es un cantante que escuché toda la vida, desde chico. Y para Amanda pensamos varios nombres y Juampi se decidió por ese.

 

-¿Cómo es su rutina diaria?

-Nano va a lo que yo le llamo “escuela”, de 9 a 13 horas. Todos los días los pasa a buscar a él y a otros perros una combi y los lleva a un parque. Después a la tarde yo lo saco a hacer sus necesidades. Y Amanda sale con su banda de Lomas. Son todos bulldog francés.

 

-Contanos algún chisme jugoso de ellos

-Mmmm… a ver… Bueno, cuando se quedan solos, Amanda alguna macana se manda. Rompe plantas por ejemplo. ¡Y Nano la cubre! Él también lo hacía de cachorro.

 

-¿Tuviste que llamar un adiestrador alguna vez?

-Para ellos no, pero sí por Kumino, mi perro que adopté en 2015 y vive con mi mamá. Mordía talones cuando sentía una amenaza. Y estaba muy hiperkinético. La energía de él la he visto en pocos perros. No había manera de calmarlo. Hasta que una vez se lo dejé a mi mamá cuando me fui de vacaciones -ella vive en un campo en Pilar- y a la vuelta vi lo que se había divertido, lo que corría y me di cuenta de que era el lugar para él. Igual lo sigo viendo todo el tiempo porque voy seguido. Y es increíble la conexión que tenemos. Él sabe que es mío y yo soy suyo, aunque no vivamos juntos. Tenemos algo muy especial desde el principio.

 

-¿Cómo llegó a vos?

-Me llegó una foto suya por redes. Cuando lo vi conecté en el momento con él y contacté a las chicas que lo habían rescatado. Lo habían encontrado en la calle un día de lluvia de mucho frío.

 

-Hace poco se hizo famoso cuando subiste su foto a tus redes porque se había perdido… ¿Cómo hicieron para encontrarlo?

-Fue algo muy raro porque no se va jamás. Podría haberse escapado mil veces y nunca lo hizo. Creemos que se fue atrás de una ardilla. Lo encontramos porque tenemos cámaras de seguridad y fuimos para el lado que se había ido. Estaba en una plaza jugando con una perra. Yo digo que le tiró su espíritu callejero. Tuvo ganas de volver a las calles.

 

-Vos que conocés a tantos famosos… si fueran celebrities argentinas… ¿quiénes serían?

-Nano sería el Tucu López, un negro fachero. Aunque un poco entrado en kilos (risas). Nano no es tan atlético. Amanda sería Lali o Tini, una joven revelación, una chica de moda. Muy fashion,muy top. Y Kumino sería Cachete Sierra por lo sinvergüenza, en el buen sentido de la palabra por supuesto. Chamullero… jodón pero fachero, carismático.

 

-¿El año que viene vas a seguir en Intrusos?

-Sí, se viene el segundo año al frente del programa junto a (Adrián) Pallares. Y estoy viendo si cierro algo de radio. En eso estamos.

 

Cuenta de Instagram: @rodrilussich

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