Lady no la tuvo fácil desde 2012 cuando quedó huérfana al fallecer su primer dueño y la dejó sin hogar. En ese entonces fue a parar al refugio de animales del condado, Chautauqua, en la ciudad de Kansas, EEUU.
Lady fue así regresada al refugio y, meses más tarde, adoptada nuevamente aunque esta vez por otros propietarios poco afectuosos de cuyo hogar terminó escapándose bajo protesta.
Dice la leyenda que heroicamente se lanzó a la carretera y caminó cincuenta kilómetro sin parar hasta dar con la casa previa, la del perrito.
Lo insolito es que ni siquiera de esta manera —tras semejante odisea— Lady logró conmover a la familia ¡que la volvió a rechazar! llevándola al refugio una vez más.
Fue ahí que en el Facebook del refugio en cuestión postearon una foto que partía al medio:
Se hizo conocer
Pronto esta imagen y la historia de la perra dos veces rechazada se tornarían virales, sensibilizando a toda la comunidad mascotera americana y provocando un punto de quiebre en la vida de la protagonista, como en un cuento de hadas perruno.
Lo que sucedió fue que entre tantos nuevos fans, su situación captó la atención de un multimillonario amante de los animales quien la mandó a buscar desde Odessa, Florida.
De un día para el otro, la perra desamparada que supo atravesar miles de kilómetros en solitario viajaba en un jet privado rumbo a su destino, un campo paradisíaco, de más de 1000 hectáreas.
Ahí fue donde Lady recuperó su verdadero nombre y ahora vive feliz junto a una comunidad de animales rescatados de refugios, sus nuevos amigos ,hasta julio de este año cuando falleció entre amigos y cariño.