El presidente ruso, Vladimir Putin, recibirá una perrita de raza Akita, cortesía de la provincia de japonesa de ese mismo nombre, para felicitarlo por su reelección en el cargo, informó hoy la agencia Kyodo.
Durante la reciente cumbre en junio del G20 en Los Cabos, México, el primer ministro nipón, Yoshihiko Noda, ofreció a Putin, que tiene dos perros y es amante de estos animales, una cachorra de pelo rojizo de esta raza de apenas dos meses.
No es la primera vez que le regalan un perro a Putin. En el 2010 el primer Ministro de Bulgaria le entrego un cachorro búlgaro (un perro pasto de la raza karakachán).
El animal, que viajará a Moscú hacia el mes de agosto, servirá para conmemorar la reciente reelección de Putin como presidente ruso y para promover los intercambios con el país, según Kyodo.
La raza Akita saltó a la fama con la historia de «Hachiko», un perro que incluso después de la muerte de su dueño siguió esperándole durante años, como hacía cada día, a la salida de la estación de metro de Shibuya, en el centro de Tokio.
La actitud de «Hachiko», considerado un ejemplo de la lealtad canina, fue exaltada por la sociedad nipona, que lo considera un referente nacional y que para rendirle homenaje erigió una estatua de bronce y un mural en el lugar donde se cree esperaba a diario a su dueño.
Su historia no paso desapercibida para Hollywood que la utilizó para la película «Hachiko: A Dog’s Story», protagonizada por Richard Gere.