CHARO LOPEZ & PICO

La actriz asegura que, si bien siempre le gustaron los perros, su hija Elvira le despertó aún más el fanatismo por ellos. Tanto, que tiene una colección de réplicas en la biblioteca de su casa. 

Por Paula Labonia

Fotos: Flor Petra

 

¿Cómo es Pico?

Ahora que está viejo es como un budita. Muy tranquilo, le gusta descansar y ir cerca de quien esté en casa. Siempre quiere tener un contacto. Y en la plaza es muy sociable, se le acerca a la gente para que lo acaricie. Ya casi que no juega con perros, como que le hinchan.

¿Antes era más activo?

Durante el primer tiempo era un diablo, un demonio. Masticaba todo lo que era tecnología de Steve Jobs. Muy Android, odiaba todo lo que fuera Mac. Comió cargadores, rompió baterías, todo lo que pudo. Y meó todo lo que pudo también. ¡Sacado!  Tuve que tirar un sillón porque lo meó todo. Fue irrecuperable. También se metía adentro de la cama y daba vueltas abajo de las sábanas. Corría sobre él mismo para agarrarse la cola y se caía. Muy sabandija. 

¿Cómo lograron que se portara bien?

Maduró. Y creo que con la castración bajó mil cambios. Antes de la operación había que darle paseos re largos para que gastara energía. Después le cambió la personalidad 100%.

¿Cómo llegó a tu vida?

Llegó hace diez años. Nació el 2 de abril y lo fui a buscar en junio a la casa de una señora que tenía un pug y una chihuahua y se le habían cruzado. Por eso es un chug: gordito con trompita, o sea el hocico medio largo. Y por eso le pusimos Pico. 

¿Cómo empezaste a coleccionar perros de cerámica?

Porque mi hija (N de la R: Elvira, de 8 años) es muy fanática de los perros y me despertó más el fanatismo a mí. Tengo la biblioteca llena de perritos que voy comprando en ferias, casas de antigüedades o me traigo de los viajes. Y a veces compro por Mercado Libre a la noche también (risas). Son como de porcelana.

¿Siempre te gustaron los perros?

Sí. A los 4 años me regalaron mi primer perro y me crié con él. Siempre fue muy especial. Después tuve otro más que era un poco más arisco y también tuve muchos años una dóberman que medio que crecimos juntas y éramos parecidas. Dormía entera adentro de mi cama. Éramos como dos seres largos y negros (risas). Siempre uno atrás de otro. No recuerdo una etapa de mi vida sin perro. 

¿Con Pico también duermen juntos?

Sí, con Pico dormimos juntos también.

Y con la dóberman dijiste que eran parecidas… ¿Pico se parece en algo a vos?

Sí, en que le gusta comer y dormir (risas).

Instagram: @charonlopez y @picothechug