El Jack Russell Terrier es un perro ágil, que a pesar de su tamaño pequeño tiene mucha fuerza y resistencia. Es un Terrier de trabajo, alerta, tenaz e independiente con la capacidad de ir bajo tierra. Un excelente perro de compañía para personas activas. Esta raza tiene una variante llamada Parson Russell terrier.
Su color básico y predominante debe ser el blanco (un mínimo de 55%) aunque puede presentar manchas en marrón, tostado o negro en varias partes del cuerpo. Su pelo dependera del tipo de cepillado, mantenimiento y cuidado del mismo. Su altura media a la cruz es de entre 25 y 30 cm, su peso aproximado es de entre 5 y 7 kilos. Viven un promedio de 15 años. Suelen tener alrededor de entre 4 y 6 crías, y su gestación dura 2 meses.
Son perros sumamente activos, inquisitivos y vivaces por lo que requieren de espacios abiertos donde ejercitarse para, así, poder dar rienda suelta a su inagotable energía e interminable curiosidad. Requieren de un entrenamiento constante, consistente y paciente que les permita estimular su aguda inteligencia. No son perros recomendables para personas sedentarias, dueños primerizos o familias con niños muy pequeños. Se les puede adiestrar para gran cantidad de actividades, especialmente si se utiliza su natural tendencia para salto, rastro, persecución de presa y cavado profundo: son excelentes cazadores de roedores y alimañas. También se les ha utilizado exitosamente como actores, hecho que les ha valido conquistar la simpatía popular debido a que son perros poseedores de un carisma difícil de igualar.
Esta raza de perros debe su nombre al Reverendo John (Jack) Russell. Nacido en 1795 en Darmouth, Inglaterra, fue pastor durante muchos años en la parroquia de Swymbridge, en el condado de Devon. Amante de los terrier, durante sus estudios en Oxford compró su primer perro de estas características, una hembra blanca de pelo duro con marcas en la cabeza llamada Trump, que por la descripción y foto que de ella se conservan se parece bastante al actual estándar FCI del Jack Russell Terrier.
La caza del zorro era muy practicada en el condado de Devon en la época en la que vivió el reverendo Russell, y él era un apasionado de esta actividad. Su afición le llevó a la crianza de perros. Así, comenzó a cruzar perros de caza, más exactamente terrier de distintas razas unicolores y multicolores. Lo que él buscaba era mejorar la aptitud de los ejemplares, no homogeneizar el aspecto físico de los mismos y por ello al morir no dejó un estándar concreto. Los cruces y la no estandarización de la raza han provocado divergencias acerca del aspecto actual del Jack Russell Terrier.